Turbo, animación a toda velocidad

Dreamworks trae a las pantallas españolas su nueva propuesta de animación, Turbo, con un toque automovilístico y con claras reminiscencias de la saga Cars, de su competidora Pixar. El argumento tiene como protagonista a Turbo, un caracol que tiene como sueño convertirse en el más rápido del mundo. Cuando milagrosamente adquiere el poder de la súper-velocidad, Turbo intenta perseguir su sueño, primero haciéndose amigo de una peculiar pandilla de caracoles callejeros y después intentando competir en su anhelado deseo de ganar las 500 millas de Indianápolis.

El origen de la película tiene lugar hace 10 años, cuando el director de Turbo, David Soren, participó en una presentación de ideas organizada por DreamWorks para sus empleados. Tenía diez minutos para exponer una propuesta de una página de película de animación y, según cuenta él mismo, la pensó la noche antes y la presentó como “un The Fast and The Furious con caracoles”. El estudio de animación vio potencial en la idea de Soren y le compró el proyecto que ahora aterriza en España.

A nivel técnico, uno de los mayores retos que tuvo la creación de Turbo fue la animación de los personajes, en este caso caracoles, para impregnarlos de personalidad propia y hacerlos parecer simpáticos. La principal dificultad en la producción radicó en que los caracoles eran elementos complicados de animar porque su cara es bastante limitada. Sin cejas en la cara, los animadores tuvieron que buscar la forma de transmitir emociones más allá de una cara feliz o triste. Después de mucha reflexión, se les ocurrió utilizar los párpados para hacer la función de las cejas y también utilizar el caparazón del caracol para gesticular en lugar de las extremidades. El resultado son unos animalitos muy simpáticos, divertidos y que les encanta la velocidad. ¿Qué os parecen?